domingo, 29 de diciembre de 2013

Re: Atilio Borón: "Acá ha habido un plan perfectamente concebido para desestabilizar el país"

Q pasa con el lune¿

On December 13, 2013 11:36:13 AM PST, Eva Troxler wrote:

Atilio Borón: “Acá ha habido un plan perfectamente concebido para desestabilizar el país”

El politólogo y sociólogo habló con Mañana es hoy sobre las protestas extorsivas de las policías provinciales a las que calificó de “aberrantes y premeditadas”.

http://radionacional.com.ar/images/sizes/288x216/FOTOS2013/Varios/Personajes-Personalidades/boron-atilio.jpg

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En diálogo con Roberto Caballero y Marcos Cittadini Atilio Bordón se refirió a las protestas que llevaron adelante las policías de varias provincias.

Evaluó que “es un tema que debe ser seguido con mucha atención porque la Argentina ha logrado un éxito notable que es llevar a juicio y condenar a los responsables de la dictadura militar y eso es algo que no muchos países han podido hacer; por ejemplo las víctimas del franquismo en España, que no encuentran justicia en su país inician causas judiciales en el nuestro”.

En este marco agregó que “si bien hemos hecho un gran avance en establecer la supremacía civil sobre las Fuerzas Armadas, cosa que ni Chile ni Brasil por ejemplo han podido lograr, nos estamos debiendo una reforma policial”.

“Lo que está ocurriendo es aberrante y premeditado” sentenció el analista y agregó; “acá ha habido un plan de trabajo perfectamente concebido, porque acá no hay hambruna, hay un plan de desestabilización del país”.

Al ser consultado sobre el contexto regional, comparó lo ocurrido en la Argentina en los últimos días, con “un acto de indisciplina policial que llevó a un Golpe de Estado en Ecuador contra el gobierno de Rafael Correa”

En este contexto Atilio Borón explicó que “las Policías de los países de América Latina están cumpliendo el rol que cumplían las Fuerzas Armadas en los años ´60 o ´70 como guardianes de un cierto orden”.

Como contrapartida de esto señaló que el Gobierno Nacional debe llevar adelante una serie de medidas destinadas a reorganizar a las policías provinciales.

Evaluó que “los gobernadores no pueden manejar a su arbitrio la política de remuneración de las fuerzas policiales”.

Finalmente y al ser consultado sobre la posible intervención de agentes externos en estos conflictos, Borón recordó que “hay una fuerte contraofensiva de Estados Unidos para recuperar el control sobre varios países de América Latina”

Y agregó que no hay que olvidar que en muchos, muchísimos casos, los trabajos de entrenamiento de las policías provinciales o nacionales de Argentina o de otros países, se realiza en Estados Unidos.

·         Jueves, 12 de Diciembre de 2013 19:47

 

 

(Fuente: Radio Nacional)


jueves, 26 de diciembre de 2013

Mercenarios israelíes en Paraguay

Mercenarios israelíes en Paraguay

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18/12/2013 /PIA/ .- Mercenarios del Estado Sionista de Israel operan al interior de las fuerzas de seguridad de Paraguay, según denunció una senadora de ese país. La legisladora señaló que agentes del Mossad forman parte del equipo de seguridad del presidente Horacio Cartes e intervienen en operaciones contra el Ejército del Pueblo (EPP) y el narcotráfico. El avance de la militarización y represión contra campesinos paraguayos busca expandir los agronegocios en los que el sionismo israelí tiene fuertes intereses económicos en juego.

"En otros países esto empezó así y terminó con paramilitares. Es gravísimo. (…) El presidente no dice públicamente que hay israelíes que están metidos dentro de las fuerzas de seguridad, entre los policías y los militares. Son unos mercenarios. ¿Y si esos están violando los derechos humanos en el Norte? ¿A quién se le pide cuentas?, si no están dentro de las estructuras de las fuerzas de seguridad", denunció la senadora Desiree Masi del Partido Democrático Progresista de Paraguay.

Meses atrás un medio local señaló que agentes del Mossad operaron en los departamentos de San Pedro, Concepción y Amambay. También se denunció que Cartes contrató miembros de la misma fuerza como parte de su seguridad personal.

A su vez, se dio a conocer que Yair Klein estuvo en Paraguay en el año 2011, formó a grupos paramilitares y combatió en el norte contra el EPP, según reseñó entonces Hispan TV. Klein es un reconocido sionista que posee una empresa privada de conformación de cuadros paramilitares, entre los que se cuentan los grupos armados irregulares paraestatales de Colombia.

La senadora Masi, también señaló que civiles paraguayos participan en acciones militares, tal es el caso de un banquero – Hugo Portillo- amigo y socio económico de Cartes que intervino en una operación contra el EPP. El propio Ministro del interior, Francisco de Vargas, sostuvo que investigarán la denuncia, ya que Portillo era un ex asesor de la Secretaría Nacional Antidrogas, pero no estaba habilitado a combatir con las Fuerzas Armadas. El cuestionado Portillo fue quien ofreció al Gobierno Nacional la incorporación de tecnología militar y de inteligencia del Estado sionista de Israel .

Agronegocios

Los combates contra la guerrilla en Paraguay se articulan con la represión y desalojo contra los campesinos en un marco de profundización de políticas neoliberales. El Gobierno avanza con la militarización como parte de la política en beneficio de los capitales privados, el sector financiero, los tenedores latifundistas de la tierra y las empresas transnacionales vinculadas a agronegocios. En esos rubros, el sionismo israelí tiene fuertes intereses.

A fines de octubre, autoridades del Gobierno de Paraguay viajaron al Estado sionista de Israel y mantuvieron una reunión con el primer ministro Benjamín Netanyahu. La comitiva estuvo encabezada por el Ministro de Comercio Gustavo Leite quien viajó junto a funcionarios vinculados a los agronegocios, a la par que organizaciones campesinas paraguayas denuncian el avance de medidas neoliberales en el sector.

"La delegación paraguaya será huésped del Ministro de Agricultura de Israel durante el día miércoles visitando los más avanzados centros de investigación, desarrollo y negocios en dicho sector", puntualizaron desde la cartera de Comercio en esa oportunidad. Mientras desde el estado sionista ingresa alta tecnología para los agronegocios, Paraguay exporta carne y soja, principalmente.

Mercenario israelí habría formado paramilitares en Paraguay, según reportaje de canal internacional

Por E'a  septiembre 4, 2013   I

Palabras Clave  Paramilitares, Yair Klein

Sería responsable de ataques mortales en el campo, según informes a los que tuvo acceso Hispantv. Se trataría de Yair Klein, quien formó paramilitares y milicias del narcotráfico en Colombia. El Ministerio del Interior dijo al medio que el mismo no presta "servicios al gobierno".

 

Yair Klein. Foto: El Espectador.

"Varios informes de inteligencia en Paraguay hablan de la implicancia de Yair Kleim, de origen israelí en casos de extrema violencia", indica un reportaje del canal internacional Hispantv. Klein habría estado en el país para combatir al Ejército Paraguayo del Pueblo (EPP) en el año 2011, indica.

Varios referentes de derechos humanos en Paraguay mostraron preocupación ante esta posibilidad. El Dr. Joel Filartiga aseguró que Klein es un "terrorista profesional mercenario". "Lo trajo Uribe Vélez, presidente de Colombia, para crear paramilitares" agrega el médico.

"Informes de inteligencia lo señalan como responsable de ataques mortales en el campo", en Paraguay, que dejan a la población en zozobra en el norte de Paraguay", agrega en otra parte el material.

Defensores de derechos humanos afirman que la aparición de paramilitares solo contribuiría a generar más violencia.

El periodista Jorge Zárate expresó al respecto, "aquí se intenta mostrar como una esencia de acción la movilización militar, cuando la acción debería ser el Estado completo en forma de guardapolvos, de los médicos, de los docentes, de técnicos agrícolas".

Juan Carlos Troche, corresponsal y quien realiza el reportaje para Hispantv, señala que el Ministerio del Interior les aseguró que Yair Klein "no presta servicios en el gobierno".

Klein

Yair Klein es un veterano de guerra israelí que estableció una empresa privada de mercenarios llamada Spearhead Ltd con la que proveyó de armas y entrenamiento a fuerzas armadas y así como grupos armados irregulares de varios países en especial de Sierra Leona y de Colombia donde entrenó a grupos paramilitares en la década de 1980.

En segunda mitad de los años 80 entrenó a los grupos paramilitares colombianos, así como a las milicias del narcotráfico de ese país, encabezadas por hombres como Gonzalo Rodríguez Gacha (El Mexicano) y Pablo Escobar Gaviria (El Patrón). Actualmente se refugia en su país de origen, tras intentos infructuosos de países como Colombia, que solicitaron su extradición.

Klein fue condenado por una corte colombiana en 2002, pero en ese entonces no fue capturado, entre otros motivos porque los procesos prescribieron y una circular roja de la Interpol en su contra expiró.

Tras su paso por Colombia, estuvo en Sierra Leona, país donde pagó una condena de 16 meses por proporcionarle armamento al grupo subversivo Frente Revolucionario Unido.

Klein afirmó en una entrevista con Caracol Televisión que visitó Colombia por solicitud de la policía para entrenar a sus miembros. Criticó el proceso de desmovilización de los paramilitares, calificándolo de "estupidez" y dijo que, si lo dejaran volver a Colombia, sería capaz de destruir la guerrilla de las FARC en seis meses. Dicha entrevista motivó a las autoridades colombianas a pedir nuevamente su captura. La Interpol emitió una circular roja contra él y otros dos mercenarios israelíes en abril de 2007.

Fue detenido en Rusia en agosto de 2007.

El 11 de febrero de 2008, el Gobierno de Rusia anunció que extraditará a Bogotá al ex coronel israelí Yair Klein, condenado en ausencia por terrorismo en Colombia.

El 3 de abril de 2010, la Vicepresidencia de la República de Colombia criticó fuertemente una decisión del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) en relación con la extradición del criminal de guerra Yair Klein.

El 9 de noviembre de 2010 es negada la orden de extradición para Yair Klein por parte del gobierno de su país en donde permanece oculto tras la medida de aseguramiento que existe en su contra desde el 2002; simplemente porque se cree que no habrá garantías de su seguridad en una cárcel de Colombia.

En noviembre de 2012, Klein declaró ante el Tribunal superior de Bogotá. En dicha declaración dijo que los entrenamientos a grupos de autodefensa que realizó en Colombia en los años 80 eran conocidos y estaban respaldados por el Gobierno de la época, sin indicar nombres concretos.

fuente: Agencia PIA

Resumen Latinoamericano

domingo, 22 de diciembre de 2013

Marihuana libre en Uruguay: Mujica, el amigo progre de Soros y Rockefeller

Marihuana libre en Uruguay: Mujica, el amigo progre de Soros y Rockefeller

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por Sergio Barrera/ 20 de diciembre 2013.- Cuando se empezaron a realizar marchas pidiendo por la legalización del consumo de marihuana, escribí que detrás de esta política, en realidad se encontraban los intereses para nada altruistas y libertarios de importantes figuras de la burguesía mundial imperialista.

Escribí dos notas una en el 2011 y otra en el 2012, que están publicadas en varios portales y que se pueden leer por ejemplo en:

http://comunicacionpopular.com.ar/la-generacion-thcdistintas-visiones-sobre-la-despenalizacion-de-la-marihuana-la-izquierda-y-los-sectores-populares/

Recomiendo leerlas antes, ya que para no repetir los conceptos de esas notas me voy a concentrar en las nuevas noticias venidas del Uruguay.

En las últimas semanas nos enteramos que el Estado legaliza el consumo de la marihuana y se hace cargo de la comercialización, ya que la producción queda en manos privadas. Todo esto, con la intención de “combatir” el narcotráfico.

Si no puedes derrotarlos…

La ley que acaba de ser votada en ambas Cámaras legislativas uruguayas regula la venta de marihuana en farmacias, bajo control del Estado. Una o varias empresas privadas plantarán el cannabis y será el Estado el que lo distribuya. De esta forma, se garantizaría la “calidad” de la mercancía. También estarán habilitados los clubes de cultivadores y en cada hogar se podrá tener hasta seis plantas para consumo personal.

Cada persona podrá consumir hasta 40 gramos de marihuana por mes: según los expertos esto alcanzaría para como mínimo dos porros por día. O sea, esto garantiza estar “fumado” todos los días, todo el mes, sin problemas… Si es para naturalizar el consumo, no podrían haberlo hecho mejor.

Claro que el Estado-culposo dice que habrá “campañas publicitarias para desalentar el consumo y materias en las escuelas y liceos para explicar los perjuicios de la marihuana”. Algo así, como las advertencias en los paquetes de cigarrillos sobre lo perjudicial que es fumar. Ya sabemos qué éxito tienen estos mensajes en los fumadores. Lo que no explica el gobierno progre de Mujica es por qué los niños y adolescentes no van a consumir algo que es perfectamente legal y que el propio Estado se ocupa de que no falte en cada hogar uruguayo, claro que “para reducir o terminar con el mercado negro”.

El secretario de la Junta Nacional de Drogas dijo: “Queremos arrebatarle al narcotráfico su mercado” y se sinceró: “El mercado ilegal es de mucho riesgo y mala calidad. El Estado va a ofrecer un lugar seguro para comprar, un producto de buena calidad y, encima, lo va a vender al mismo precio”. Tranquis, el Estado aquí no estará ausente, y garantizará “de la buena”.

Lo terrible es que algunos diputados del Frente Amplio, después de reconocer que la marihuana producía “apatía, cansancio, ansiedad y esquizofrenia”, remataron diciendo que “la marihuana es una bosta con o sin ley” y “con o sin ley, el problema del narcotráfico y el consumo va a seguir pasando”.

O sea, si no podemos derrotarlos, tomemos el problema en nuestras manos… vendámosla nosotros.

Los capitalistas necesitan un Estado que haga punta…

El presidente Mujica se reunió en Nueva York con George Soros  y David Rockefeller, quienes reúnen una fortuna personal de 25.000 millones de dólares, el 50% del PBI anual uruguayo. Ambos ofrecieron aportes para financiar las campañas a desarrollar para poner a punto el plan de producción, venta y consumo de la marihuana.

Es que estos grandes exponentes del capitalismo mundial hace años que vieron la punta de un gran negocio. Estamos hablando de un mercado mundial de la marihuana, aun como sustancia ilegal, de 180 millones de consumidores. La legalización podría multiplicar el consumo en forma geométrica.

En momentos en que se necesita obtener plusvalía para sostener a cualquier costo la tasa de ganancia, la burguesía busca nuevos nichos. Y piensan que no es justo que en “su sistema”, los narcos se queden con la parte del león de un negocio de poca inversión y altísimas tasas de ganancias. Así que, si la marihuana es una mercancía, tienen que ir al mercado, tiene que cotizar en bolsa y ya sabemos quiénes controlan las bolsas de valores del mundo.

Desde el Open Society Foundation, George Soros viene bregando desde hace años por la legalización de la marihuana a nivel global. En Estados Unidos comenzaron en los estados de Colorado y Washington, con la regulación desde hace varios años del consumo para uso medicinal como primer paso, que no es otra cosa que un Caballo de Troya, que no tiene mala prensa, para pasar de contrabando la naturalización del consumo con fines recreativos. Desde la regularización del consumo de marihuana en el estado de Colorado y por ende su generalización como uso recreativo hubo un aumento de los consumidores frecuentes. Del 2006 al 2011 aumentó el 114% la cantidad de conductores a los que dio positivo el test de consumo de marihuana. En el 2011, el consumo en menores de 12 a 17 años, que en todo el país era del 7,64 %, en Colorado era del 10,74%. En el caso de los adultos de 18 a 25 años, la diferencia era mayor: el promedio para el país era de 18,7% y en Colorado trepaba a 27,26%. Soros y diferentes sectores del complejo industrial militar organizados en la DPA (Drug Policy Alliance), en 2010 invirtieron varios millones de dólares en una campaña por la despenalización de la marihuana en el estado de California (la Propuesta 19). A pesar de las operaciones para influir en el resultado de este plebiscito, esa cláusula fue rechazada por los californianos.

De ahí la importancia que le dan estos magnates de los negocios a que un Estado, por más pequeño que sea, vaya sentando antecedentes y jurisprudencia sobre la liberalización del consumo de drogas. Sus fundaciones saludan el “experimento” o “laboratorio” que el gobierno uruguayo realizará con la regulación del mercado del cannabis a partir de la producción por parte de privados con autorización del Estado y su venta controlada en farmacias. Esto permitirá establecer un precio testigo de base, referencia para el mercado mundial. El gobierno uruguayo ya adelantó que andaría en alrededor de un dólar el gramo.

Esto ya disparó una fiebre bursátil, y en la actualidad la marihuana ya cotiza en bolsas de Estados Unidos e Inglaterra. Ya aparecieron varias empresas como GW Pharmaceuticals, Cannabis Science, Medical Marijuana y Medbox, que ante las posibilidades cada vez más concretas de la liberalización del consumo de marihuana ven aumentar sus acciones en forma exponencial.

Un exejecutivo de Microsoft, Jamen Shively, planea crear la primera marca nacional de marihuana en EE.UU. El comercio mundial de marihuana estaba valorado en el 2005, según informes de la ONU, en 142.000 millones de dólares (108.853 millones de euros).”Es un mercado gigante en busca de una marca”, ha dicho Shively sobre la industria de la marihuana. “Estaríamos felices si tenemos el 40 por ciento de ella en todo el mundo”.

Ante Rockefeller el viejo luchador guerrillero se sinceró: “Venir a verlo a usted es para nosotros como cruzar el Rubicón, porque usted es el símbolo de una realidad, y nosotros siempre reconocemos las realidades”, le dijo Mujica.

Este realismo del presidente uruguayo lo acerca al mundo de los negocios de una de las familias más emblemáticas del capitalismo mundial y es correspondido, ya que en una reunión en el famoso hotel Waldorf Astoria, en el corazón de Manhattan, con el vicepresidente de Estados Unidos, Joseph Biden, este a su vez le expresó su “profunda admiración”.

Harm Reduction (reducción de daños)… para el capitalismo

Soros financia varios grupos que buscan la legalización del consumo de drogas. Los argumentos esgrimidos por Soros son sencillos, según la lógica neoliberal capitalista levantada también por los pensamientos posmodernos: el consumo de drogas es un tema privado, el Estado no puede meterse, ya que pasaría sobre los derechos civiles de las personas. Entonces, tenemos un problema y lo único que nos queda es “reducir los daños”, ya que no podemos prohibir el consumo. También el Estado se desembarazaría de gastos que aumentan su déficit económico.

Para muchos, esto no es otra cosa que la privatización del consumo, logrando con esto que el Estado se desentienda de un serio problema social que afecta la salud de toda la población e hipoteca el futuro de las generaciones venideras.

¿Droga vs. narcotráfico?

En la página de la Presidencia de la República Oriental del Uruguay se nos informa que, durante el transcurso de la reunión con Soros, “el presidente Mujica explicó las características del proyecto y de las intenciones del Gobierno, ratificando que el principal problema para el país no es la droga en sí sino que es el narcotráfico” .

El error es pensar que se pueden separar los términos de un mismo problema. Son dos caras de una misma moneda, y el gran ausente son los seres humanos atrapados en una adicción que, por las consecuencias psicoactivas —totalmente comprobadas a esta altura—, con índices de THC (tetra-hidrocarbo-cannabinol) modificados que llegan al 15 % y 16%, superan los de la década del ‘60, en plena fiebre hippie, cuando no llegaban al 5-6%.

¿Nos imáginamos qué porcentaje de THC va a tener la marihuana en manos de los capitalistas, cuya único objetivo es la ganancia? ¿Tratarán de que provoque más o menos dependencia?

Es evidente que este razonamiento es cómo mínimo funcional al lobby de los Soros, Rockefeller y Cia. ¿Es un simple toma y daca, a cambio de las promesas que le hicieron a Mujica en los EE.UU., de financiamientos en campañas para instalar el proyecto y la posibiliadad de ubicar producción agrícola uruguaya en ese mercado?

Cualquiera que sea la respuesta, lo que es un hecho es que no se tiene en cuenta la gravedad que implica la generalización y naturalización del consumo de marihuana. El lobby capitalista necesita un Estado que haga punta para proyectar su política a todo el mundo. ¿Tenía que ser justo un gobierno “progre”, de “izquierda” o “centroizquierda” el vehículo para tales propósitos?

Hablemos de semillas…

George Soros es el segundo mayor accionista de Monsanto y como vimos más arriba, fue uno de los principales impulsores de la Proposición 19 en EE.UU., que planteaba “producir cannabis para fines científicos, médicos, industriales y de investigación” y “adoptar un sistema de regulación a nivel estatal para un comercio de la industria canabica”. Esto le abre las puertas a Monsanto y a petroquímicas, laboratorios y empresas farmacéuticas para comercializar, regular, controlar y graduar los impuestos sobre el cannabis a través de ingeniería genética, patentes y licencias en EE.UU.

¿Y por qué no probar en el mundo, en donde gobiernos “progresistas” son un mejor vehículo para llevar adelante estas políticas?

Igualmente, en la Argentina, el gobierno “progre” de Cristina Fernández de Kirchner –quien también se reunió con G. Soros– impulsó la modificación de la ley 23.737 del Código Penal, que establece las condenas a quienes realicen actividades relacionadas en mayor o menor medida con el consumo, tenencia y comercialización de estupefacientes. Pero allí, en la letra chica hay un puntito que deroga la penalización de la comercialización de semillas para cultivar plantas utilizables para producir estupefacientes, aunque no así la penalización de la planta en sí misma. Es decir, se podrá comercializar semillas pero no plantas vivas. Soros y Monsanto de parabienes, los dueños de las semillas del mundo, mientras investigan sobre una marihuana transgénica, descorchan champagne ante un futuro mercado global, cautivo, de consumidores crónicos de marihuana.

(Fuente: Resumen Latinoamericano)

viernes, 20 de diciembre de 2013

Extinción del magnífico Perro Polar Argentino


Extinción del magnífico Perro Polar Argentino (creación ARG)

 

 

 

 

 

 

El perro polar argentino (PPA) es una raza canina extinta, desarrollada por el Ejército Argentino para equipar sus bases antárticas en funciones de transporte. El PPA fue un cruce de Husky Siberiano, Alaskan Malamute, Groenlandés y Spitz Manchuriano. Se extinguió en 1994 como consecuencia de su repatriación al continente en cumplimiento de la normativa del Tratado Antártico de Protección del Ambiente (TAPMA). Desarrollada por enfermeros veterinarios del Ejército Argentino pensando en dotar a los miembros de las expediciones antárticas argentinas y a los habitantes de nuestras bases de un compañero recio, inteligente, afectuoso, eficaz y trabajador, incansable y provisto de un enorme y enconmiable espíritu de sacrificio, esta raza era, en todos los sentidos, productora de los mejores perros de trabajo que jamás se vieron por las tierras australes. En el origen del Perro Polar Argentino se encontraban varias de las principales razas árticas de trabajo: se lo desarrolló a partir del Husky Siberiano, del Alaskan Malamute, del Groenlandés y de Spitz Manchuriano. La formación y estabilización de las características de esta raza insumió la friolera de 31 años de trabajo a cargo de un equipo de más de treinta suboficiales enfermeros veterinarios militares, entre los que se recuerda a Héctor Martín y a Félix Daza Rodríguez. El Polar Argentino era un perro de respetable tamaño, que llegaba a pesar 60 kilos en los machos y 52 en las hembras. Estaba poderosamente blindado contra el frío: tenía el pelaje dividido en tres capas (lana, pelo y subpelo), con una capa de grasa subcutánea de 2 cm. de espesor que lo aislaba del ambiente. Eran impresionantes animales de tiro, con una capacidad de tracción que duplicaba la de cualquiera de las razas de las que descendía, con increíbles registros de resistencia y velocidad. Un tiro de 11 perros polares argentinos era capaz de arrastrar un trineo cargado con 1,1 toneladas a 50 km/h en terreno llano y a 80 en terrenos de 45° de inclinación durante 6 horas ininterrumpidas. Los 70° bajo cero constituían para ellos una temperatura normal de trabajo, y cuando la base soviética Vostok registró el récord mundial histórico de frío (89,3° bajo cero) los perros polares argentinos se encontraban allí de visita y jadeaban tranquilamente en ese frío capaz de congelar el aliento. Los Polares se alimentaban una sola vez al día (el doble que los Huskies siberianos), pero igualmente su mantenimiento era incomparablemente más barato que el gasoil de los tractores, que por supuesto no rendían las mismas prestaciones que los perros. Ni siquiera era necesario darles de beber, ya que solventaban sus necesidades de agua ingiriendo hielo. Uno de los peligros más importantes en las travesías antárticas son las grietas, no importa si se utilizan trineos de perros o tractores orugas. Pues bien, entre las soberbias capacidades del Perro Polar Argentino se contaba la de "detectar" u "olfatear" (el mecanismo íntimo continúa sumido en el misterio, y los animales no están aquí para estudiarlos) las grietas, evitando los accidentes y salvando vidas humanas que de otra forma se habrían perdido (recuérdese el luctuoso accidente que costó la vida a un soldado y un científico). Un ejemplar famoso: El más recordado de los perros polares argentinos, un ejemplar llamado "Poncho", se destacó en la historia polar argentina por su increíble capacidad de avisar a los hombres de que frente a ellos se encontraba una grieta oculta. En una oportunidad, además, guio con toda precisión a un equipo de rescate hasta los sobrevivientes de un accidente de aviación, que fueron recuperados en su totalidad. "Poncho" fue embalsamado por el sacerdote Juan Ticó, y su cuerpo se conserva en la ciudad de Ushuaia. Eran capaces de intuir o predecir las tormentas, ayudando a evitar salidas fallidas; no perdíanr la orientación jamás, ni siquiera en medio del temporal más espantoso; se especializaban en encontrar a hombres o vehículos perdidos (lo que los convertía en excelentes rescatistas), y su capacidad para transitar terrenos cuya escasa solidez nunca hubiera soportado el peso de los tractores-oruga era una virtud inapreciable. El caso particular de "Poncho" fue muy especial, porque pudo guiar con seguridad y por el camino más rápido a un equipo de rescate que buscaba a los tripulantes de un avión estrellado. Así, los aviadores pudieron ser extraídos de los restos del aparato más rápida y seguramente de lo que lo hubieran sido si no hubieran existido los perros polares argentinos. La utilidad última del Polar Argentino, el último sacrificio que era capaz de hacer por sus amos y amigos, era el hecho de que podía servir de sustancioso alimento en casos de muy extrema necesidad. Más de una vez —sobre todo en las primeras expediciones de principios del siglo XX—, los exploradores debieron comerse a algunos de sus perros o sacrificar a algunos de los del tiro para que los demás comieran y poder llegar a destino. Esto, como se comprende, tampoco puede hacerse con un tractor. Pero independientemente de todo ello, los habitantes de las bases antárticas argentinas con cierta antigüedad recuerdan con cariño y devoción a sus perros desaparecidos porque —como tampoco podrían hacerlo los tractores— representaron para ellos y a lo largo de décadas, inagotables fuentes de amor, afecto, abrigo y compañía en las largas, interminables noches polares en plena soledad. Ante semejantes y excelentes prestaciones, el lector se preguntará con todo derecho: ¿por qué se extinguió el Perro Polar Argentino? ¿Cómo permitimos semejante cosa? Para conocer la explicación, hay que referirse al entrenador de perros y experto argentino Sergio Grodsinsky, que ha sido el único que ha escrito sobre el tema y a quien consideramos la máxima autoridad sobre el particular. En agosto de 1991, los países con presencia en la Antártida se reunieron en Madrid para redactar y aprobar el Tratado Antártico de Protección del Medio Ambiente (TAPMA). El TAPMA, según Grodsinsky, "impulsó entre otras ‘cositas` impedir hacer reclamaciones territoriales hasta 50 años después y compelió a ‘preservar el ecosistema" aludiendo pretextos proteccionistas". Afirma el experto que el TAPMA dispuso expresamente el retiro de los perros polares del territorio austral, estableciendo que el 1° de abril de 1994 no podía quedar ninguno en el continente entero. Si alguno no hubiese podido ser evacuado, tendría que ser sacrificado. Pero...¿por qué? Porque una institución denominada Scientific Commitee on Antartic Research ("Comité Científico de Investigación Antártica") dictaminó en la reunión madrileña que los Perros Polares Argentinos "transmitían el moquillo a las focas" (¿?), que "depredaban las pingüineras" y que "albergaban en su pelaje parásitos capaces de alterar el equilibrio ecológico de la Antártida". Tal sarta de argumentos es calificada por el experto argentino de la siguiente manera: "No hay mito ni leyenda que encuentre oposición cuando la superstición viene del `Primer Mundo`, es `moderna` y se autoproclama `científica`". Analizaremos, siguiendo a Grodsinsky, los falaces y seudocientíficos argumentos del citado Comité: La enfermedad de Carré (conocida comúnmente como distemper o "moquillo canino") no se transmite a las focas ni a ninguna otra especie aparte de Canis lupus. Así como nosotros no podemos transmitir nuestra gripe a un gato o un perro, el cánido no transmite el moquillo a la foca. Es cierto que estos pinnípedos tienen su propia versión del moquillo, como la tienen los gatos (panleucopenia felina) y los monos (catarro de Fisher), pero son provocadas por diferentes virus, ineptos para infectar a otra especie que a sus huéspedes natural. Tanto la base argentina General San Martín (al sur del Círculo Polar Ártico) como la base Esperanza, ubicada en el extremo norte de la Isla Trinidad, las dos en las cuales moraban los perros polares argentinos, siempre vacunaron a sus animales contra el moquillo. Y los vacunaron bien. Esto significa: dos dosis al cachorro y un refuerzo anual para los adultos, aplicado sin falta todos los años. Esta revacunación anual en la hembras gestantes impide también la aparición de la enfermedad en los ejemplares neonatos. Las expediciones argentinas sin base permamente siempre estuvieron obligadas a seguir el mismo plan de vacunación. Por último, desde que los primeros perros polares argentinos pusieron sus fuertes patas en el continente blanco por primera vez (1951) hasta la expulsión del TAPMA (1994), nunca se declaró, denunció ni documentó un caso de moquillo entre los ejemplares argentinos. A fuer de ser sinceros, tampoco en los animales de otras razas pertenecientes a bases extranjeras. Nunca, jamás, en ninguna base de ningún país se detectó moquillo. Es una enfermedad que jamás existió en el continente antártico. Por el contrario, las únicas patologías caninas presentes en las bases argentinas consistieron en parasitosis y dermatitis producidas en los perros por picaduras de piojos y pulgas... ¡transmitidos a los perros por focas y pingüinos! Con respecto a los perros "depredadores de pingüinos", hace falta señalar que, una vez más, se trata de una falacia. No es imposible que alguna vez un perro haya matado a un pingüino, pero corresponde decir que la superpoblación de los pingüinos, depredadores del krill ellos mismos, produce graves enfermedades por hacinamiento. Esta superpoblación de aves jamás podría verse afectada por uno o dos ejemplares que se escaparon de sus bases a lo largo de toda la historia. Con respecto a las focas, resulta directamente ridículo imaginar a un perro de 60 kilos atacando y matando a una foca de 500 o 600 kilos. Si alguna vez un perro argentino devoró a una foca, fue porque encontró su cadáver en la costa, ya que las vivas huyen de los depredadores terrestres zambulléndose (siendo que el buceo es una de las pocas capacidades que el Perro Polar Argentino nunca logró desarrollar). Por último, si los perros argentinos eran "una especie exótica" que "desequilibraba el ecosistema antártico", exactamente lo mismo puede decirse de los seres humanos, incluidos los "científicos" que decidieron la expulsión de los cánidos. Por no hablar del hecho de reemplazar a los perros por tractores a gasoil, que, además de liberar gases de efecto invernadero, contaminan la Antártida con los malolientes y untuosos desechos de la combustión de hidrocarburos y los cambios de lubricantes. Finalmente, el especialista argentino se hace una última pregunta capital: si se han prohibido los perros en la Antártida pero no en el Polo Norte: "¿Por qué los perros en el Ártico no contagian a la focas?". La Argentina, como firmante del Tratado Antártico, no quiso denunciarlo y se sometió mansamente a la obligación de retirar a sus perros, dejando claramente asentada, sin embargo, su posición mediante el voto en contra. Así, pues, los 56 ejemplares que la nación mantenía en la Antártdia se dispusieron a ser evacuados a Tierra del Fuego antes de que se cumpliera la fecha límite del tratado. Pero, ¡ay!... considérese que los perros polares argentinos llevaban 43 años siendo criados en la Antártida, generación tras generación, sin contacto con perros provenientes de fuera y, lo que es más importante, sin contacto con los gérmenes patógenos normales en los perros. La conclusión es que habían perdido toda inmunidad orgánica. De la primera tanda de 30 animales llevados a Ushuaia, 28 murieron en brevísimo lapso, víctima de enfermedades para las cuales cualquier perro callejero se encuentra inmunizado naturalmente. Los dos ejemplares sobrevivientes de aquel grupo no tuvieron ninguna posibilidad de reproducirse... porque ambos eran machos. El segundo embarque (26 ejemplares) también sufrió los rigores de bacterias y virus para los que no estaban preparados, cayendo víctimas de una espantosa mortandad. Los pocos sobrevivientes (animales tal vez más fuertes que sus compañeros) fueron dispersados y desperdigados en manos de distintos propietarios adoptivos, ubicados muy lejos unos de otros. Incapaces de reproducirse entre ellos, los perros polares argentinos se cruzaron con otras clases de caninos, y su fuerte y extraordinaria genética se diluyó en la población canina de Tierra del Fuego, extinguiéndose de este modo esa portentosa raza argentina. Así, la emigración obligada por una ley basada en mentiras, logró lo que el hostil ambiente del invierno antártico, el hambre, la soledad, el trabajo a destajo, los vientos brutales y el frío asesino nunca hubiesen conseguido: privar a nuestros hijos y nietos del placer de la compañía de este soberbio y deventurado perro criollo. Tal vez alguien, en un futuro cercano, reproduciendo los cruzamientos de aquellos tesoneros veterinarios militares, pueda reproducir las cruzas que ellos hicieron y lograr, con cuidado, respeto y cariño, que el hermoso y orgulloso Perro Polar Argentino vuelva a caminar y tirar alegremente de los trineos, si no en la Antártida, al menos en las dilatadas tierras de la Patagonia Argentina.

jueves, 19 de diciembre de 2013

Extinción del magnífico Perro Polar Argentino


Extinción del magnífico Perro Polar Argentino (creación ARG)

 

 

 

 

 

 

El perro polar argentino (PPA) es una raza canina extinta, desarrollada por el Ejército Argentino para equipar sus bases antárticas en funciones de transporte. El PPA fue un cruce de Husky Siberiano, Alaskan Malamute, Groenlandés y Spitz Manchuriano. Se extinguió en 1994 como consecuencia de su repatriación al continente en cumplimiento de la normativa del Tratado Antártico de Protección del Ambiente (TAPMA). Desarrollada por enfermeros veterinarios del Ejército Argentino pensando en dotar a los miembros de las expediciones antárticas argentinas y a los habitantes de nuestras bases de un compañero recio, inteligente, afectuoso, eficaz y trabajador, incansable y provisto de un enorme y enconmiable espíritu de sacrificio, esta raza era, en todos los sentidos, productora de los mejores perros de trabajo que jamás se vieron por las tierras australes. En el origen del Perro Polar Argentino se encontraban varias de las principales razas árticas de trabajo: se lo desarrolló a partir del Husky Siberiano, del Alaskan Malamute, del Groenlandés y de Spitz Manchuriano. La formación y estabilización de las características de esta raza insumió la friolera de 31 años de trabajo a cargo de un equipo de más de treinta suboficiales enfermeros veterinarios militares, entre los que se recuerda a Héctor Martín y a Félix Daza Rodríguez. El Polar Argentino era un perro de respetable tamaño, que llegaba a pesar 60 kilos en los machos y 52 en las hembras. Estaba poderosamente blindado contra el frío: tenía el pelaje dividido en tres capas (lana, pelo y subpelo), con una capa de grasa subcutánea de 2 cm. de espesor que lo aislaba del ambiente. Eran impresionantes animales de tiro, con una capacidad de tracción que duplicaba la de cualquiera de las razas de las que descendía, con increíbles registros de resistencia y velocidad. Un tiro de 11 perros polares argentinos era capaz de arrastrar un trineo cargado con 1,1 toneladas a 50 km/h en terreno llano y a 80 en terrenos de 45° de inclinación durante 6 horas ininterrumpidas. Los 70° bajo cero constituían para ellos una temperatura normal de trabajo, y cuando la base soviética Vostok registró el récord mundial histórico de frío (89,3° bajo cero) los perros polares argentinos se encontraban allí de visita y jadeaban tranquilamente en ese frío capaz de congelar el aliento. Los Polares se alimentaban una sola vez al día (el doble que los Huskies siberianos), pero igualmente su mantenimiento era incomparablemente más barato que el gasoil de los tractores, que por supuesto no rendían las mismas prestaciones que los perros. Ni siquiera era necesario darles de beber, ya que solventaban sus necesidades de agua ingiriendo hielo. Uno de los peligros más importantes en las travesías antárticas son las grietas, no importa si se utilizan trineos de perros o tractores orugas. Pues bien, entre las soberbias capacidades del Perro Polar Argentino se contaba la de "detectar" u "olfatear" (el mecanismo íntimo continúa sumido en el misterio, y los animales no están aquí para estudiarlos) las grietas, evitando los accidentes y salvando vidas humanas que de otra forma se habrían perdido (recuérdese el luctuoso accidente que costó la vida a un soldado y un científico). Un ejemplar famoso: El más recordado de los perros polares argentinos, un ejemplar llamado "Poncho", se destacó en la historia polar argentina por su increíble capacidad de avisar a los hombres de que frente a ellos se encontraba una grieta oculta. En una oportunidad, además, guio con toda precisión a un equipo de rescate hasta los sobrevivientes de un accidente de aviación, que fueron recuperados en su totalidad. "Poncho" fue embalsamado por el sacerdote Juan Ticó, y su cuerpo se conserva en la ciudad de Ushuaia. Eran capaces de intuir o predecir las tormentas, ayudando a evitar salidas fallidas; no perdíanr la orientación jamás, ni siquiera en medio del temporal más espantoso; se especializaban en encontrar a hombres o vehículos perdidos (lo que los convertía en excelentes rescatistas), y su capacidad para transitar terrenos cuya escasa solidez nunca hubiera soportado el peso de los tractores-oruga era una virtud inapreciable. El caso particular de "Poncho" fue muy especial, porque pudo guiar con seguridad y por el camino más rápido a un equipo de rescate que buscaba a los tripulantes de un avión estrellado. Así, los aviadores pudieron ser extraídos de los restos del aparato más rápida y seguramente de lo que lo hubieran sido si no hubieran existido los perros polares argentinos. La utilidad última del Polar Argentino, el último sacrificio que era capaz de hacer por sus amos y amigos, era el hecho de que podía servir de sustancioso alimento en casos de muy extrema necesidad. Más de una vez —sobre todo en las primeras expediciones de principios del siglo XX—, los exploradores debieron comerse a algunos de sus perros o sacrificar a algunos de los del tiro para que los demás comieran y poder llegar a destino. Esto, como se comprende, tampoco puede hacerse con un tractor. Pero independientemente de todo ello, los habitantes de las bases antárticas argentinas con cierta antigüedad recuerdan con cariño y devoción a sus perros desaparecidos porque —como tampoco podrían hacerlo los tractores— representaron para ellos y a lo largo de décadas, inagotables fuentes de amor, afecto, abrigo y compañía en las largas, interminables noches polares en plena soledad. Ante semejantes y excelentes prestaciones, el lector se preguntará con todo derecho: ¿por qué se extinguió el Perro Polar Argentino? ¿Cómo permitimos semejante cosa? Para conocer la explicación, hay que referirse al entrenador de perros y experto argentino Sergio Grodsinsky, que ha sido el único que ha escrito sobre el tema y a quien consideramos la máxima autoridad sobre el particular. En agosto de 1991, los países con presencia en la Antártida se reunieron en Madrid para redactar y aprobar el Tratado Antártico de Protección del Medio Ambiente (TAPMA). El TAPMA, según Grodsinsky, "impulsó entre otras ‘cositas` impedir hacer reclamaciones territoriales hasta 50 años después y compelió a ‘preservar el ecosistema" aludiendo pretextos proteccionistas". Afirma el experto que el TAPMA dispuso expresamente el retiro de los perros polares del territorio austral, estableciendo que el 1° de abril de 1994 no podía quedar ninguno en el continente entero. Si alguno no hubiese podido ser evacuado, tendría que ser sacrificado. Pero...¿por qué? Porque una institución denominada Scientific Commitee on Antartic Research ("Comité Científico de Investigación Antártica") dictaminó en la reunión madrileña que los Perros Polares Argentinos "transmitían el moquillo a las focas" (¿?), que "depredaban las pingüineras" y que "albergaban en su pelaje parásitos capaces de alterar el equilibrio ecológico de la Antártida". Tal sarta de argumentos es calificada por el experto argentino de la siguiente manera: "No hay mito ni leyenda que encuentre oposición cuando la superstición viene del `Primer Mundo`, es `moderna` y se autoproclama `científica`". Analizaremos, siguiendo a Grodsinsky, los falaces y seudocientíficos argumentos del citado Comité: La enfermedad de Carré (conocida comúnmente como distemper o "moquillo canino") no se transmite a las focas ni a ninguna otra especie aparte de Canis lupus. Así como nosotros no podemos transmitir nuestra gripe a un gato o un perro, el cánido no transmite el moquillo a la foca. Es cierto que estos pinnípedos tienen su propia versión del moquillo, como la tienen los gatos (panleucopenia felina) y los monos (catarro de Fisher), pero son provocadas por diferentes virus, ineptos para infectar a otra especie que a sus huéspedes natural. Tanto la base argentina General San Martín (al sur del Círculo Polar Ártico) como la base Esperanza, ubicada en el extremo norte de la Isla Trinidad, las dos en las cuales moraban los perros polares argentinos, siempre vacunaron a sus animales contra el moquillo. Y los vacunaron bien. Esto significa: dos dosis al cachorro y un refuerzo anual para los adultos, aplicado sin falta todos los años. Esta revacunación anual en la hembras gestantes impide también la aparición de la enfermedad en los ejemplares neonatos. Las expediciones argentinas sin base permamente siempre estuvieron obligadas a seguir el mismo plan de vacunación. Por último, desde que los primeros perros polares argentinos pusieron sus fuertes patas en el continente blanco por primera vez (1951) hasta la expulsión del TAPMA (1994), nunca se declaró, denunció ni documentó un caso de moquillo entre los ejemplares argentinos. A fuer de ser sinceros, tampoco en los animales de otras razas pertenecientes a bases extranjeras. Nunca, jamás, en ninguna base de ningún país se detectó moquillo. Es una enfermedad que jamás existió en el continente antártico. Por el contrario, las únicas patologías caninas presentes en las bases argentinas consistieron en parasitosis y dermatitis producidas en los perros por picaduras de piojos y pulgas... ¡transmitidos a los perros por focas y pingüinos! Con respecto a los perros "depredadores de pingüinos", hace falta señalar que, una vez más, se trata de una falacia. No es imposible que alguna vez un perro haya matado a un pingüino, pero corresponde decir que la superpoblación de los pingüinos, depredadores del krill ellos mismos, produce graves enfermedades por hacinamiento. Esta superpoblación de aves jamás podría verse afectada por uno o dos ejemplares que se escaparon de sus bases a lo largo de toda la historia. Con respecto a las focas, resulta directamente ridículo imaginar a un perro de 60 kilos atacando y matando a una foca de 500 o 600 kilos. Si alguna vez un perro argentino devoró a una foca, fue porque encontró su cadáver en la costa, ya que las vivas huyen de los depredadores terrestres zambulléndose (siendo que el buceo es una de las pocas capacidades que el Perro Polar Argentino nunca logró desarrollar). Por último, si los perros argentinos eran "una especie exótica" que "desequilibraba el ecosistema antártico", exactamente lo mismo puede decirse de los seres humanos, incluidos los "científicos" que decidieron la expulsión de los cánidos. Por no hablar del hecho de reemplazar a los perros por tractores a gasoil, que, además de liberar gases de efecto invernadero, contaminan la Antártida con los malolientes y untuosos desechos de la combustión de hidrocarburos y los cambios de lubricantes. Finalmente, el especialista argentino se hace una última pregunta capital: si se han prohibido los perros en la Antártida pero no en el Polo Norte: "¿Por qué los perros en el Ártico no contagian a la focas?". La Argentina, como firmante del Tratado Antártico, no quiso denunciarlo y se sometió mansamente a la obligación de retirar a sus perros, dejando claramente asentada, sin embargo, su posición mediante el voto en contra. Así, pues, los 56 ejemplares que la nación mantenía en la Antártdia se dispusieron a ser evacuados a Tierra del Fuego antes de que se cumpliera la fecha límite del tratado. Pero, ¡ay!... considérese que los perros polares argentinos llevaban 43 años siendo criados en la Antártida, generación tras generación, sin contacto con perros provenientes de fuera y, lo que es más importante, sin contacto con los gérmenes patógenos normales en los perros. La conclusión es que habían perdido toda inmunidad orgánica. De la primera tanda de 30 animales llevados a Ushuaia, 28 murieron en brevísimo lapso, víctima de enfermedades para las cuales cualquier perro callejero se encuentra inmunizado naturalmente. Los dos ejemplares sobrevivientes de aquel grupo no tuvieron ninguna posibilidad de reproducirse... porque ambos eran machos. El segundo embarque (26 ejemplares) también sufrió los rigores de bacterias y virus para los que no estaban preparados, cayendo víctimas de una espantosa mortandad. Los pocos sobrevivientes (animales tal vez más fuertes que sus compañeros) fueron dispersados y desperdigados en manos de distintos propietarios adoptivos, ubicados muy lejos unos de otros. Incapaces de reproducirse entre ellos, los perros polares argentinos se cruzaron con otras clases de caninos, y su fuerte y extraordinaria genética se diluyó en la población canina de Tierra del Fuego, extinguiéndose de este modo esa portentosa raza argentina. Así, la emigración obligada por una ley basada en mentiras, logró lo que el hostil ambiente del invierno antártico, el hambre, la soledad, el trabajo a destajo, los vientos brutales y el frío asesino nunca hubiesen conseguido: privar a nuestros hijos y nietos del placer de la compañía de este soberbio y deventurado perro criollo. Tal vez alguien, en un futuro cercano, reproduciendo los cruzamientos de aquellos tesoneros veterinarios militares, pueda reproducir las cruzas que ellos hicieron y lograr, con cuidado, respeto y cariño, que el hermoso y orgulloso Perro Polar Argentino vuelva a caminar y tirar alegremente de los trineos, si no en la Antártida, al menos en las dilatadas tierras de la Patagonia Argentina.

martes, 17 de diciembre de 2013

George Soros, el magnate detrás de la legalización de la marihuana en Uruguay

George Soros, el magnate detrás de la legalización de la marihuana en Uruguay

Gerardo Lissardy

BBC Mundo, Brasil

 Martes, 17 de diciembre de 2013

Soros: "Tenemos que experimentar y Uruguay es uno de los países experimentando".

Hay varios puntos que separan a quienes están a favor y en contra de legalizar la marihuana en las Américas, pero existe uno en el que todos parecen coincidir: el magnate George Soros y su Open Society Foundations se han vuelto actores claves en el tema.

El nombre del húngaro-estadounidense de 83 años resonó en el debate sobre el cannabis en Uruguay, tras conocerse que Open Society financió una campaña a favor de la ley que la semana pasada convirtió a ese país en el primero en legalizar el comercio de la droga.

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Soros, un controvertido inversionista, especulador y filántropo que en 1992 contribuyó a provocar una devaluación de la libra esterlina, también se reunió en septiembre con el presidente uruguayo, José Mujica, para discutir su iniciativa respecto a la marihuana.

"Como él tiene influencia en algunas ONG importantes, estuvo colaborando y va a seguir colaborando en eso", declaró Mujica al finalizar ese encuentro en Nueva York.

clicLea: Uruguay legaliza producción y venta de marihuana

Fundada y presidida por Soros, Open Society financia también grupos que impulsan cambios en la estrategia sobre cannabis en la región y Estados Unidos, incluida la Comisión Global sobre Política de Drogas que integran los expresidentes Fernando Henrique Cardoso (Brasil), Ernesto Zedillo (México) y César Gaviria (Colombia), entre otras personalidades.

"Open Society ha sido un actor muy clave dando apoyo a grupos de la sociedad civil que buscan promover una apertura" en la política de drogas, le dijo a BBC Mundo John Walsh, un experto de la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA), que también recibe donaciones de la fundación de Soros.

Pero, ¿por qué un octogenario considerado entre los hombres más ricos del mundo tiene tanto interés en la política regional de drogas?

Derechos humanos

La DEA ha criticado duramente la legalización de la marihuana en Uruguay.

Soros salvó su vida en la ocupación nazi de Hungría gracias a su padre y dejó el país tras sobrevivir a la batalla de Budapest entre tropas alemanas y soviéticas.

Luego de instalarse en EE.UU. y amasar fortunas con sus fondos de inversión, comenzó a financiar proyectos de apertura en países de la antigua Unión Soviética y en otras partes del mundo. Sus donaciones han sumado miles de millones de dólares.

"No podemos hablar de derechos humanos sin cuestionar la guerra a las drogas"

Pedro Abramovay

Pedro Abramovay, exsecretario de Justicia de Brasil que este año pasó a dirigir los trabajos de Open Society en América Latina, indicó que además de la política de drogas su equipo trabaja en temas como derechos humanos, transparencia y migración.

"El punto es que con las drogas tal vez seamos uno de los únicos", le dijo Abramovay a BBC Mundo, marcando una diferencia con las otras áreas de acción que involucran a muchas más organizaciones.

Indicó que la preocupación por la política sobre narcóticos deriva del interés en promover los derechos humanos. "No podemos hablar de derechos humanos sin cuestionar la guerra a las drogas", aseguró.

Y negó que la estrategia de Open Society en la región pueda tener algún vínculo con los negocios de Soros en el área agrícola o de cualquier otro tipo.

"Soy director y responsable para la estrategia de Open Society en América Latina y no sé absolutamente nada de los negocios de Soros", afirmó Abramovay. "Nunca he recibido ningún tipo de presión ni dirección que venga de la parte de los negocios".

"Experimentar"

"No podemos hablar de derechos humanos sin cuestionar la guerra a las drogas", dice Pedro Abramovay, exsecretario de Justicia de Brasil.

Open Society invierte unos US$34 millones en América Latina y 10% de ese total se destina a la temática de las drogas, financiando organizaciones en la región que impulsan cambios de política y tejiendo contactos entre ellas, informó su director regional.

En EE.UU., uno de los grupos que recibe ayuda de la fundación de Soros es la Drug Policy Alliance, que impulsó la legalización de la marihuana en Colorado y Washington y envió una experta a Uruguay durante el trámite de la ley.

"No sabemos cuál es el mejor tratamiento, tenemos que experimentar y Uruguay es uno de los países experimentando"

George Soros

La campaña publicitaria a favor de la legalización de la marihuana en Uruguay se realizó a través de Regulación Responsable, una coalición que reúne diferentes organizaciones e individuos.

El costo de esa campaña fue de unos US$100.000, un monto significativo para el mercado uruguayo, de los cuales cerca de US$60.000 provinieron de Open Society, según informaron medios locales.

"No sabemos cuál es el mejor tratamiento, tenemos que experimentar y Uruguay es uno de los países experimentando", declaró Soros tras su reunión con Mujica. "Queremos reducir el daño causado por las drogas y la guerra a las drogas".

Uruguayos en contra

Mujica refutó las críticas de la agencia antinarcóticos de la ONU a la nueva ley uruguaya.

De hecho, Open Society se apresta a pasar a una nueva etapa en Uruguay, apoyando un sistema de evaluaciones independientes sobre el impacto de la ley, indicó Abramovay.

Y sostuvo que en Uruguay "están muy contentos" con esa ayuda.

Sin embargo, no todos los uruguayos parecen de acuerdo.

Pedro Bordaberry, senador del opositor Partido Colorado, criticó que en este tema Mujica haya buscado apoyo de Soros y David Rockefeller, otro magnate estadounidense con quien se reunió en Nueva York.

"Antes marchaban con el Che Guevara por la tierra y ahora marchan con Soros y Rockefeller por la marihuana"

Pedro Bordaberry

"Antes marchaban con el Che Guevara por la tierra y ahora marchan con Soros y Rockefeller por la marihuana", dijo Bordaberry. "No queremos ni a Soros ni a Rockefeller ni ser experimento", agregó en diálogo con BBC Mundo.

El senador citó reportes periodísticos uruguayos que sugirieron que el interés de Soros podría estar vinculado a negocios de Monsanto, multinacional especializada en siembra y venta de semillas genéticamente modificadas, aunque dijo carecer de pruebas al respecto.

Ante esas versiones, Monsanto emitió un comunicado en septiembre negando que tuviera "vinculación con el desarrollo o comercialización de marihuana" o que estuviera trabajando "para patentar una semilla de marihuana transgénica en Uruguay ni en ningún otro lugar del mundo".

Abramovay negó por su parte que Soros sea accionista de Monsanto, advirtiendo que en este tema "se abre un espacio grande para teorías de la conspiración".

Walsh, el especialista de WOLA, sostuvo empero que por razones políticas "esa pregunta sobre los intereses de Soros va a mantenerse como en el aire, a pesar de las negaciones".

"(Soros) es un tipo con una riqueza que no se puede imaginar", afirmó.

Y aseguró que a su edad "no necesita" tramar eventuales negocios con la marihuana.